Organizar ese primer viaje soñado a Italia desde Latinoamérica… es pura emoción. La ruta clásica es clara: Roma, Florencia y Venecia. Has visto las fotos, has soñado con la pasta y el gelato. Pero entonces, abres Google Maps y empiezas a planificar de verdad.
Ahí es cuando llegan las dudas reales. ¿Empiezo por Venecia y bajo, o arranco en Roma y subo? ¿Tengo que comprar los billetes de tren ya? ¿Cuánto tiempo real se pierde en un traslado?
Un itinerario por Italia mal planificado se convierte, te lo aseguro, en una carrera agotadora de estación en estación. Uno bien planificado, es la Dolce Vita.
Como expertos en diseñar estos viajes, hemos visto todos los errores (y todos los aciertos). Aquí tienes nuestros 10 consejos más pragmáticos para que tu primer itinerario por Italia sea perfecto.
1. El Dilema: ¿Empezar por el norte o por el sur?
Esta es la primera gran decisión. Para la ruta clásica, tienes dos opciones:
- Opción A (La que recomendamos): Venecia -> Florencia -> Roma.
- ¿Por qué? Porque empiezas en la ciudad más mágica y “tranquila” (Venecia), donde el ritmo es caminar y navegar. Bajas a Florencia para tu dosis de arte y terminas con el “final épico” en la inmensidad de Roma. Es un crescendo perfecto. Logísticamente, vuelas a Venecia (VCE) y regresas desde Roma (FCO).
- Opción B: Roma -> Florencia -> Venecia.
- Es igualmente válida. Llegas al aeropuerto más grande (Roma), te aclimatas, subes al arte (Florencia) y terminas relajándote en los canales (Venecia). Vuelas a Roma (FCO) y regresas desde Venecia (VCE).
Nuestro consejo: Nosotros preferimos la Opción A. Empezar por Venecia te permite “aterrizar” en Italia con un impacto de belleza pura, sin el caos inicial de una gran ciudad como Roma.
2. El Error LATAM: Querer verlo todo (y no ver nada)
Es normal. El viaje desde Latinoamérica es largo y costoso. La tentación de “aprovechar” y meter Milán, Cinque Terre, la Costa Amalfitana y Sicilia en 12 días es enorme.
Pero, en serio: no lo hagas. Italia es un país para saborear, no para devorar. Si intentas verlo todo, pasarás la mitad de tu valioso tiempo en trenes y haciendo check-outs.
Para un primer viaje de 10 a 12 días, concéntrate en la “Santísima Trinidad”: Roma, Florencia y Venecia. Confía en nosotros, cada una de ellas merece cada minuto que les asignes.
3. Asigna bien los días (La regla de oro: 4-3-3)
¿Cuánto tiempo en total? Ya lo hemos hablado, pero aquí va el resumen para un itinerario de 10 días netos de viaje:
- Roma: Necesitas un mínimo de 4 días. Es la ciudad más grande, compleja e inabarcable. (Puedes leer nuestra guía sobre cuántos días dedicar a Roma).
- Florencia: 3 días es el ideal. Te da 2 para la ciudad y 1 para una posible escapada a la Toscana. (Aquí te explicamos los días necesarios en Florencia).
- Venecia: 3 días es perfecto para ver la isla principal y escapar a las islas de Murano y Burano. (Revisa aquí cuántos días estar en Venecia).
Total: 10 días. Créenos, este es el itinerario perfecto. Equilibrado y sin carreras.
4. El tren de Alta Velocidad es tu mejor amigo (el coche no)
No alquiles un coche para ir de ciudad a ciudad. Es una pésima idea. Las grandes ciudades tienen ZTL (Zonas de Tráfico Limitado) donde no puedes entrar, el parking es una pesadilla carísima y el tren es, simplemente, superior.
Los trenes de alta velocidad (Frecciarossa de Trenitalia e Italo) son tu mejor aliado: van de centro de ciudad a centro de ciudad. Los tiempos son de no creer:
- Roma a Florencia: 1 hora 30 minutos.
- Florencia a Venecia: 2 horas 15 minutos.
El truco de oro: Compra estos billetes con 2 o 3 meses de antelación. Los precios no “suben un poco”, se disparan a medida que se acerca la fecha.
5. El “día de traslado” NO es un día de turismo
Este es, quizás, el error de cálculo más común. Si tu tren de Florencia a Venecia sale a las 11:00 am, ese día no es un día de turismo.
Piénsalo: entre hacer check-out, caminar a la estación, el viaje, llegar a Venecia, tomar el vaporetto para encontrar tu hotel, hacer check-in y orientarte… perdiste media jornada. Como mínimo.
Al planificar, marca esos días de traslado en rojo. Tómalos con calma y no programes la visita al museo más importante para esa misma tarde.
6. Hoteles: ¿cerca de la estación o no?
- En Roma: Termini (la estación) es práctica, pero la zona no es la más bonita. Vale la pena quedarse en el Centro Storico (Panteón/Navona) o en Trastevere y, simplemente, tomar un taxi a la estación el día que te vas.
- En Florencia: La estación Santa Maria Novella (SMN) está muy céntrica. Aquí sí vale la pena quedarse cerca, puedes ir caminando a casi todo.
- En Venecia: Este es el caso MÁS CRÍTICO. Quedarse cerca de la estación Santa Lucia es una bendición para las maletas. Si tu hotel está cerca de San Marcos, prepárate para un viaje largo en vaporetto (bus acuático) o para soltar 80€ en un taxi acuático. Cuidado con esto.
7. La logística de las entradas: el verdadero estrés
Aquí está el verdadero desafío del viaje. No es el itinerario, es conseguir las entradas.
- El Coliseo Romano libera entradas en fechas específicas y se agotan en minutos.
- Los Museos Vaticanos requieren reserva, punto.
- La Galería Uffizi y la Accademia (el David) en Florencia se agotan con meses de antelación.
El consejo es simple: si no quieres pasar 4 horas de tus valiosas vacaciones en una fila (o peor, quedarte sin entrar), reservar con tiempo no es una opción. Es una obligación.
8. Usa Florencia como tu base de operaciones
Si te pica el gusanillo de la Toscana (ver San Gimignano, Siena) o hacer una escapada rápida a Pisa, no estés cambiando de hotel. Es un desgaste inútil. Usa Florencia como tu base de operaciones. Está perfectamente conectada por trenes regionales para hacer viajes de ida y vuelta en el día.
9. Dos palabras clave: “Coperto” y “Aperitivo”
- Coperto: Es un cargo fijo (2-4€ por persona) en la mayoría de los restaurantes solo por sentarte. No es la propina, es el derecho de mesa (e incluye el pan).
- Aperitivo: La hora mágica (usualmente de 6:00 pm a 8:00 pm). Pides una bebida (un Aperol Spritz, por favor) y te da acceso a un buffet de snacks. Es una cena ligera, económica y muy, muy italiana.
10. Deja de planificar y pide ayuda
Has leído todos los consejos. Probablemente ahora te das cuenta de que coordinar 3 hoteles, 3 trenes de alta velocidad, 5 entradas de museos que se agotan y los traslados desde aeropuertos… es, básicamente, un trabajo a tiempo completo.
Y tienes razón. Lo es.
Tu trabajo es soñar con el Coliseo. El nuestro es asegurarnos de que tengas la mejor entrada para él, que tu hotel esté perfectamente ubicado y que tu billete de tren conecte sin un gramo de estrés con tu siguiente destino.
En TourExperto, no vendemos tours genéricos. Creamos itinerarios a medida que, simplemente, funcionan.
Preguntas Frecuentes sobre Itinerarios en Italia
¿Cuál es la mejor ruta para un primer viaje a Italia?
La ruta clásica es Roma, Florencia y Venecia. Recomendamos el orden Venecia -> Florencia -> Roma. Empezar por Venecia te da un impacto de belleza inmediato y sin el caos de una gran ciudad, terminando con la inmensidad de Roma. Es un itinerario con un “crescendo” perfecto.
¿Cuántos días necesito para el itinerario clásico (Roma, Florencia, Venecia)?
Para un viaje sin carreras, recomendamos un mínimo de 10 días netos. Nuestra “regla de oro” es 4 días para Roma (es la más grande), 3 días para Florencia (incluyendo una escapada) y 3 días para Venecia (para ver las islas).
¿Es mejor alquilar coche o tomar tren en Italia?
Para ir entre las grandes ciudades (Roma, Florencia, Venecia), el tren de alta velocidad (Frecciarossa o Italo) es 100% superior. Es más rápido, te deja en el centro de la ciudad y evita los problemas de parking y las zonas de tráfico limitado (ZTL). No alquiles coche para esta ruta.
¿Es difícil reservar las entradas a los museos y al Coliseo?
Sí, honestamente es la parte más estresante. Las entradas para el Coliseo, los Museos Vaticanos y la Galería Uffizi (Florencia) se agotan con semanas o incluso meses de antelación. No se puede improvisar. Una mala planificación aquí significa quedarse sin entrar o pasar 4 horas en una fila.





